Me desperté y sentí su cálido aliento rozando mi pelo.
-Uuumm... ¿me he quedado dormida? -contesto yo, entre bostezos.
-Ya ves. Venga, vamos a desayunar y luego tenemos que hacer las maletas, ¿recuerdas?
Rob había reservado un hotel de lujo en Paris, para celebrar nuestro segundo año juntos. Yo estaba totalmente entusiasmada. Nunca había viajado a la "Ciudad del Amor". Posé un brazo sobre su pecho, poniéndome boca abajo. Él empezó a acariciarme la espalda suavemente, como si estuviera hecha de terciopelo. Pero luego empezó a zarandearme poco a poco replicando que teníamos prisa. Entonces me tuve que levantar.
Frotándome los ojos llegué hasta la cocina. Llevaba puestas mis zapatillas de "Hello Kitty", algo infantiles, pero me recordaban a cuando todavía vivía mi madre. Cuando falleció sufrí mucho. Yo estaba muy unida a ella y la quería con toda mi alma. Aparte de las zapatillas llevaba un camisón rojo que me habia regalado Rob el día de mi cumpleaños.
Mientras desayunabamos, empecé a pensar sobre cómo nos conocimos. Recuerdo que Christie nos presentó. Christie, ella es amiga de los dos y para mí, la mejor amiga del mundo. Puedes compartir todo lo que quieras con ella y nunca te falla. Siempre está ahí para lo que necesites. El caso es que nos presentó en su fiesta de cumpleaños, cuando teníamos 20. Fue lo que se dice, "Amor a primera vista". Nos enamoramos en ese instante y nos fuimos a un rincón para poder hablar tranquilos. Ahí surgió nuestro primer beso. Fue largo, romántico y precioso. Él se agarró a mi cintura y yo a su cuello, mientras le acariciaba. Nunca podré olvidarlo.
-¿En que piensas? -me dice, dándole un gran mordisco a una tostada de mermelada de fresa.
La pregunta me pilla por sorpresa y tardo unos instantes en contestar.
-En ti, y en cómo nos conocimos.
-Te quiero -dice, besándome en la mejilla.
Cuando terminé de desayunar fui a mi habitación a preparar una maleta para una semana y me encontré a Rob hablando por teléfono en el baño. No quería darle demasiada importancia pero sin darme cuenta, estaba ya pegada a la puerta escuchando la conversación.
-... Que si... Te mandaré el dinero sin falta... Claro... Oye, tengo que colgar...
Y en voz muy baja suelta un "Te quiero", minutos después de decirmelo a mi. Cuando termina de hablar, voy corriendo hacia la entrada de la habitación, para no mostrar que estaba escuchándole hablar por teléfono. Al salir del baño mirando su móvil y verme a mí, se muestra muy sorprendido.
-Ah, hola cariño. Estabas aquí.
-¿Con quién hablabas? -le pregunto.
-Con nadie. Era mi madre.
Y entonces me rodeó con los brazos y me empezó a besar el cuello de una forma muy romántica. A lo cual yo le devolví un beso en la boca y me tumbó encima de la cama.
-Las maletas Rob -dije apartándolo de mí.
-Las maletas.
Suena el timbre de casa y doy un salto. Me acerco hasta la puerta extrañada y cuando abro, ahí esta Christie, con una enorme sonrisa en la cara y los brazos abiertos, como si fuese a abrazarme hasta dejarme sin aire. Efectivamente, adiviné. Me empezó a apretar las costillas hasta que tuve que decirle entre carcajadas que parase.
-¿Qué se supone que haces aquí zorra? -le pregunto.
Desde el instituto nos insultamos a más no poder, pero sabemos que es de broma.
-¡Joder tía! que sólo me quería despedir de mi mejor amiga... Bueno, y de ese cachondo que esta en calzones -responde mirando a Rob con cara traviesa.
-Hola Christie -dice él, acercándose a la puerta.
-¡No lo mires, que es mio! -le digo a Christie guiñándole un ojo y abrazándome a la cintura de Rob, en plan cariñoso.
-Bueno, bueno. Está bien, Parece que os quereis mucho... Entonces no me meto -contesta ella, sonriendo de oreja a oreja.
Distingo su Gloss. Se lo regalé en su santo hace unos años. Es rosa, de fresa, su favorito. Siempre lo lleva.
De repente suena el teléfono y Rob corre hacia él.
-Verás, esta mañana, me encontré a Rob hablando por su móvil diciendo que le mandaría dinero enseguida y luego le dijo a esa persona que le quería. Después, cuando le pregunte que con quién hablaba, me respondió que con su madre. Esto me huele mal...
- Ummm... Pues si que es raro... Pero chica, ¡no tienes de que preocuparte, Rob es un gran tío!
Eso fue lo que pensé yo...
CONTINUARÁ... ;)
Conque esas, he Elena!! Tu mejor amiga se llama Christie, justo como el nombre del blog de ALGUIEN K YO M SE Y TU TAMBIEN... me parece perfecto. PERFECTO.
ResponderEliminarJooo tiaa!! que quieres, que ponga que mi mejor amiga se llama ORANGE GIRL?? no te enfadeees, que yo te quiero muuuucho!! que te ha parecido??
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